El pequeño reside actualmente en un hospital y, aunque tiene la capacidad de ver, nadie comprende completamente cómo se desarrolló su condición, según lamenta su madre. Kobi-Jai nació prematuramente en marzo de 2022, tras un complicado parto en un hospital de Bridgeпd, WɑƖes. Inmediatamente después, fue trasladado a una unidad de cuidados intensivos, donde le colocaron ventilación y una sonda de alimentación.
El niño bayo tenía un gran agujero en el corazón, una laringe flácida y un brillo alrededor de los ojos que estuvieron cerrados durante algún tiempo, informa WalesOplipe. Después de ser trasladado al Hospital Sigletop, donde pasó seis semanas, se hizo evidente que la estructura de sus ojos no se había desarrollado completamente, pero nadie podía entender por qué.
La madre de Kobi, Morgap, de 24 años, expresó que aún está en busca de respuestas más de un año después del nacimiento de su “niño muy feliz y loco”
La mujer expresó: “Nadie te prepara para ser padre, y mucho menos para serlo de un niño con tantas necesidades adicionales a la edad de 22 años”, compartió su madre.
Morga explicó: “Sea lo que sea que la vida le depare, él simplemente lo está superando. Hemos llegado a aceptar que quizás no tenga una misión de vida prolongada, pero así es como lo percibimos”.
“Tiene ojos saltones y la parte inferior de sus ojos raspa su mejilla. No se da cuenta cuando es pequeño, pero es muy triste, bendito sea”.
Debido a la condición del bebé, sus ojos son muy sensibles a la luz, lo que provoca períodos prolongados de malestar. Kobi a menudo se rasca los ojos y ocasionalmente empuja sus párpados hacia las cejas cuando le causan molestias.